Se trata de Electra, una de las 18 ballenas francas australes que fueron marcadas con transmisores satelitales durante la temporada 2021 del proyecto “Siguiendo Ballenas”. Tras un largo viaje de 18.087 km regresó a Peninsula Valdés.
Electra es una hembra equipada con un dispositivo satelital el 28 de septiembre de 2021, cuando estaba con su cría en aguas del Golfo Nuevo en Península Valdés, Chubut. Es una de las seis ballenas con dispositivo aún activo y que el 21 de mayo, tras un largo viaje de 18.087 km durante 239 días, arribó al Golfo San José. Dado que no se estableció contacto visual con Electra desde su regreso al golfo, se desconoce si aún permanece con su cría, o si ésta ya fue destetada.
Este registro es de gran relevancia por el hecho de ser una hembra con cría, dado que en su migración están sujetas a enormes demandas energéticas. Conocer las áreas y las distancias recorridas en su viaje completo es un aporte muy importante al conocimiento de esta especie.
El único registro previo de recorrido migratorio completo fue el de “Papillón”, un macho juvenil marcado en 2014, cuyo dispositivo transmitió señales durante 8 meses ininterrumpidos desde su partida del Golfo Nuevo hasta su regreso a la misma zona al año siguiente. Durante los seis meses que estuvo en mar abierto, Papillón se mantuvo cerca del borde de la plataforma continental argentina, aproximadamente a 300 millas de Península Valdés.
La travesía de Electra
Tras abandonar las aguas del Golfo Nuevo el 6 de noviembre de 2021, Electra recorrió áreas de alimentación ubicadas en la plataforma continental argentina y en aguas más profundas del borde del Talud y cercanas al Agujero Azul. Regresó al área de Península Valdés el 21 de mayo 2022 probablemente a destetar a su cría nacida en 2021.
Entre las áreas recorridas por Electra se encuentra el Agujero Azul, una región de alta productividad primaria que sirve de área de alimentación para aves y mamíferos marinos y otras especies como la merluza y el calamar.
#SiguiendoBallenas
El proyecto de seguimiento satelital de ballenas francas de Chubut y Río Negro se inició en 2014 y, desde entonces, ha registrado las trayectorias de 65 individuos. Además, el proyecto contribuye a la conservación de las ballenas francas y demuestra el gran valor de las nuevas tecnologías para su estudio.
“Siguiendo Ballenas” es posible gracias a la articulación de esfuerzos de un equipo integrado por miembros de instituciones académicas y organizaciones de la sociedad civil de tres países: CESIMAR-CONICET, CIMAS-CONICET, ESCiMar (Universidad Nacional del Comahue), Fundación Patagonia Natural, Instituto de Conservación de Ballenas, NOAA, Instituto Aqualie, Universidad de California – Davis, Wildlife Conservation Society-Argentina y el Programa de Monitoreo Sanitario Ballena Franca Austral.
Este proyecto cuenta además con el aval del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Argentina y la provincia de Chubut, y con el apoyo de la Asociación de Guías Balleneros de Puerto Pirámides.
La información que genera el proyecto #SiguiendoBallenas permite conocer los sitios que recorren las ballenas francas australes en sus rutas migratorias, desde sus áreas de reproducción y cría a las áreas de alimentación, y así localizar los ambientes claves para su ciclo de vida en el Atlántico Sur.
© Instituto de Conservación de Ballenas. GACETILLA DE PRENSA – Por primera vez se registró el viaje migratorio completo de una ballena franca con cría. Se puede reproducir citando la fuente.