El Programa de Monitoreo Sanitario Ballena Franca Austral inició una nueva temporada de actividades en el campo estudiando la salud de las ballenas de Península Valdés.
A través del compromiso de las organizaciones de la sociedad civil Instituto de Conservación de Ballenas, Ocean Alliance, Wildlife Conservation Society, Fundación Patagonia Natural y las universidades de California, Davis y Utah, los investigadores del Programa de Monitoreo Sanitario Ballena Franca Austral han iniciado la decimoséptima temporada de trabajo.
Este Programa tiene como principal objetivo estudiar cada ballena que muere en Península Valdés y alrededores para aprender sobre su salud y tratar de comprender las causas. A través de exámenes forenses se busca identificar posibles riesgos para la salud de las ballenas y evaluar su susceptibilidad a enfermedades, contaminantes y otras noxas, y de esta manera contribuir a su conservación a través de estrategias de manejo.
Una temporada alentadora
Durante los primeros meses de la presente temporada no se encontraron ballenas muertas, lo cual se confirmó a través de un relevamiento aéreo el día 31 julio. El coordinador de campo, Matías Di Martino sobrevoló todo el perímetro de Península Valdés y no registró ningún Varamiento de esta temporada. Recién el 14 de agosto, fue reportado el primer ballenato muerto de la temporada, en playa La Adela del Golfo Nuevo.
El Dr. Mariano Sironi., director científico del ICB y co director de este programa explicó:
“Esta situación es inusual en comparación con temporadas anteriores y esperamos se mantenga en estos niveles. Durante los primeros 30 años del programa de investigación que llevamos adelante conjuntamente el ICB y el Ocean Alliance, la cantidad de ballenas muertas cada temporada reflejaba la tendencia creciente del número de individuos totales en el área.
A partir del 2005, el nivel de mortalidad aumentó de manera significativa llegando a un pico en el 2012 de 116 animales, en su mayoría ballenatos. Estos niveles de mortalidad fueron los más extremos registrados para la especie en el mundo.
En años recientes el número de ballenas muertas se redujo. Así, en 2018 murieron 23 ballenas, de las cuales 22 fueron crías de la temporada y por lo que estamos viendo esta temporada también se está manteniendo en niveles muy bajos”.
¿Cómo funciona el Programa?
Ante el registro o aviso de un varamiento de una ballena franca en las costas de Península Valdés y alrededores, el equipo de campo liderado por el médico veterinario Matías Di Martino acude al sitio.
Antes de iniciar la Necropsia o examen forense se lleva a cabo un minucioso examen externo en busca de cicatrices, heridas y evidencias externas de causa de muerte, ya sean naturales o por acciones humanas (por ejemplo, cortes por hélices de embarcaciones).
De cada animal se obtienen muestras de tejidos y órganos para investigar sobre los efectos de los ataques de gaviotas, enfermedades infecciosas, biotoxinas, indicadores fisiológicos como hormonas del estrés, contaminantes, estado nutricional, dieta, genética, y los efectos directos de otras actividades humanas, como los enmalles en redes de pesca, sobre la salud de las ballenas.
La Médica Veterinaria Marcela Uhart, co directora del Programa explica:
“El programa responde a la necesidad de explorar las causas de muerte, considerando la valiosa fuente de información que representa poder acceder al cuerpo sin vida del animal. Las muestras tomadas en estos 17 años, permiten la realización de diversos estudios, como el bacteriológico recientemente publicado. Estos estudios requieren del largo plazo. Si queremos hacer conservación y buen manejo, debemos continuar estudiando a estos animales para entender lo que sus cuerpos nos están diciendo”.
Avanzando Hacia una Red Federal de Respuesta a Varamientos de Mamíferos Marinos
A lo largo de toda la costa argentina, se han incrementado los eventos de animales marinos en situación de riesgo en relación al aumento de las presiones antrópicas sobre la fauna y el aumento de la accesibilidad y urbanización de los espacios costeros. Ballenas, orcas, delfines, elefantes, lobos, aves y tortugas marinas son los más afectados. Estos eventos, requieren actuar de manera rápida, y con protocolos claros y efectivos.
Por ese motivo, la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación en alianza con las jurisdicciones costeras, organismos y referentes académicos y de la sociedad civil crearon la Red Federal de Asistencia a Varamientos de Fauna Marina a fin de generar y aplicar las mejores prácticas para el rescate.
El lanzamiento de esta Red se realizó a través de un Taller realizado en la ciudad Puerto Madryn entre el 13 y 14 de junio. El equipo del ICB participó activamente junto a los integrantes del Programa de Monitoreo Sanitario. La Med. Vet Marcela Uhart, co directora del PMSBFA e integrante el equipo de especialistas de la Comisión Ballenera Internacional de redes de varamientos efectuó dos presentaciones durante el Taller, una sobre el funcionamiento de diferentes redes establecidas a nivel internacional y sobre los estudios científicos generados a partir de las muestras tomadas de las ballenas francas varadas en la provincia de Chubut.
La Red creará un registro nacional de varamientos, cuyo análisis permitirá identificar y evaluar los problemas ambientales que afecten a la fauna en nuestras costas y mares.
Roxana Schteinbarg, coordinadora del área de Conservación del ICB concluye:
«Crear esta red es fundamental para entender y poder cuantificar los eventos de varamientos sobre todo de cetáceos que se producen a lo largo de la costa argentina. Sus cuerpos nos dicen lo que sucede en el mar y rescatar esa información es vital para establecer acciones para proteger la biodiversidad del mar argentino.»
El trabajo colaborativo y sostenido en el tiempo de las organizaciones e instituciones que llevan adelante Programa ha permitido aumentar el entendimiento sobre la biología y el estado de salud de esta especie tan emblemática de las costas de Argentina.
© Instituto de Conservación de Ballenas. GACETILLA DE PRENSA – 17 años estudiando la salud de las ballenas de Península Valdés. Se puede reproducir citando la fuente.
